Viernes 27 de junio de 2025
Al Dia

El alemán que abrió camino en la NBA

Dirk Nowitzki, el alemán, llegó sin hacer ruido a la competición, y se convirtió en un jugador franquicia de los Mavericks de Dallas.

El alemán que abrió camino en la NBA
El alemán que abrió camino en la NBA
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La mejor liga de la canasta del planeta continúa en un proceso de internalización que no tiene límites. Hace algunas décadas, la NBA parecía estar restringida a jugadores norteamericanos, en cambio, con el paso de los años, esa realidad se ha modificado ostensiblemente. De hecho, en el presente curso, un canadiense ha conquistado todos los títulos individuales posibles, dejando claro a las apuestas deportivas que deben tener en cuenta a los jugadores foráneos a la hora de realizar sus predicciones en las temporadas venideras.

No siempre fue así, y es bueno repasar aquellos jugadores que abrieron la liga de una manera clara al resto del planeta. Entre ellos, hay que destacar a Dirk Nowitzki. El alemán llegó sin hacer ruido a la competición, y se convirtió en un jugador franquicia de los Mavericks de Dallas. Repasemos su historia y su legado en la NBA para poner en valor lo que consiguió la estrella germana en el deporte de la canasta.

Desde su llegada en 1998, pocos esperaban que aquel joven alto, delgado y aparentemente tímido pudiera convertirse en una superestrella. Sin embargo, Dirk rompió barreras rápidamente. Su capacidad para lanzar desde el perímetro, especialmente con su característico tiro en fadeaway de una pierna, se volvió prácticamente indefendible. Esa jugada, tan poco ortodoxa como efectiva, se convirtió en su firma personal y fue imitada por generaciones posteriores. Con ella, abrió el camino para que jugadores altos tuvieran un papel más versátil y ofensivo, algo que hoy es común en la liga pero que entonces era revolucionario.

Nowitzki pasó toda su carrera profesional con los Dallas Mavericks, una muestra de lealtad poco común en la era moderna del deporte. Durante más de dos décadas fue el corazón del equipo, tanto por su rendimiento como por su liderazgo silencioso pero firme. En 2011, logró su consagración definitiva al conquistar el campeonato de la NBA, superando a equipos llenos de superestrellas como los Miami Heat de LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh. Aquellas Finales fueron una demostración de carácter, experiencia y determinación. Dirk fue nombrado MVP de las Finales, consolidando su legado como uno de los grandes.

Además de sus logros individuales, lo que realmente define a Nowitzki es la forma en que cambió la percepción de los jugadores internacionales en la NBA. Antes de él, existía cierto escepticismo sobre si los jugadores europeos podían ser dominantes en la liga estadounidense. Dirk no solo demostró que sí podían, sino que abrió las puertas para una nueva generación de talentos globales como Giannis Antetokounmpo, Luka Dončić y Nikola Jokić, quienes lo citan como inspiración.

Fuera de la cancha, Nowitzki también se destacó por su humildad, carisma y compromiso con la comunidad. Mantuvo siempre una imagen limpia, alejado de escándalos, y dedicó tiempo y recursos a obras benéficas tanto en Estados Unidos como en Alemania. Su despedida en 2019 fue emotiva y llena de respeto, no solo por parte de los fanáticos de Dallas, sino por toda la NBA, que reconoció su grandeza.

En definitiva, el legado de Dirk Nowitzki no solo está grabado en los récords y trofeos, sino también en la evolución del juego, la internacionalización de la liga y la admiración universal que se ganó a través de una carrera ejemplar. Fue un pionero, un campeón y, sobre todo, una leyenda.

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